Afortunadamente, éste año, podemos decir que hemos quedado bastante más satisfechos que en ediciones pasadas por el desarrollo y aplicación del Plan Romero en los días de nuestra Romería, si bien, creo que nos queda algún camino por recorrer para poder recuperar algunos detalles importantes que con las nuevas normas, de momento, han desaparecido y espero que con la buena disposición de las partes podrá buscarse un punto de inflexión en el que todos salgamos ganando. Debemos felicitarnos todos los participantes (Hermandad, Fuerzas del Orden (todas), Romeros, etc. por haber tenido un día de Llevada espléndido (quizás algo más caluroso de lo deseado) donde hemos podido compartir, cantar, bailar, beber, comer, rezar, llevar a la Virgen sobre los hombros, y todo ésto, y es lo más importante, exento de crispaciones y malos humores o ánimos exaltados. El paso dado ha sido muy importante. Quizás no debamos buscar culpables porque sabemos que todos lo somos y de ello nos vanagloriamos ahora.
Creo, y estoy seguro de ello, que muchos calañeses hemos pedido a la Virgen que no volvieran a repetirse situaciones no deseadas y que las personas que las provocaban dejaran de hacerlo y que le hicieran saber que Calañas es un pueblo devoto y fiel a sus creencias y tradiciones y que por eso se revelaba cuando veía que ellos, desconocedores de sentimientos profundos y arraigados, querían arrebatarnos el poder poner en práctica unos hábitos que desde niños nos inculcaron. Gracias Virgen de la Coronada.

Ahora, haciéndome eco de las palabras de nuestro cura, la Virgen ha vuelto a su ermita, pero la vida de la Parroquia sigue, y también que no olvidemos que una parada en la ermita es imprescindible para nuestra vida de calañeses y de devotos de Coronada.
CALAÑAS, 2014
Desgraciadamente en estas fechas me es imposible acudir a las Fiestas de la Virgen, pero gracias a tus comentarios e instantáneas, haces, me sienta presente, este año he podido degustar, de la traída, la procesión y llevada, gracias Cristóbal.
ResponderEliminarUn abrazo
Tejero García Andrés María.