Con ésta popular expresión podríamos empezar a analizar y tambien a aplicar su significado a algunas cosas que pasan en nuestro querido pueblo. A veces pasamos de la despreocupación o la falta de valoración para con las cosas propias por saber que existen y que las tenemos siempre ahí, al otro extremo, que está en supravalorar algo que por machacante o insistente se nos quiere meter entre ceja y ceja, nos guste o nó y que además no es autóctono. Vamos, que por donde quiera que estemos se nos ofrece esa nueva tendencia que sin querer empieza a resultarnos "algo pedante" o "muy empalagosa". Como soy muy dado a utilizar refranes o dichos populares (si son calañeses mejor), ya que así me acostumbró mi madre, ahora aplicaré eso de " Cuando un tonto coje un lindazo " o aquel otro con el que titulo ésta entrada: " lo poquito gusta y lo mucho cansa ".
Mi ánimo no es ofender a nadie, sino de hacer una pequeña reflexión en voz alta sobre ciertos movimientos que tienen lugar en Calañas para que nos ayude a llegar a la conclusión de que debemos " Dar al César lo que es del César... y a Dios lo que es de Dios."
CALAÑAS, 2013