Según Romero Mantero en sus apuntes
históricos, geográficos, económicos y sociales de la comunidad calañesa y su
territorio, titulado A los pies del Morante:
En 1.799, el 13
de julio se adquiere una casa para dedicarla a CILLA DE DIEZMOS, y está
situada en la calle del Pozo haciendo esquina, en su limitación al mediodía,
con calleja que viene de las Cañadas Grande y Chica a Puerto de Aspa – hoy
calle Murillo -. (Archivo Catedral de Sevilla).
De mis visitas al Archivo Arzobispal de
Sevilla, encuentro en la Sección IX, Legajo 28 Documento 11, del Fondo
Histórico General, un documento titulado
CILLA
DE CALAÑAS
Protocolo
10a
del que extraigo la siguiente información:
" con fecha dieciséis de agosto de mil
setecientos noventa y ocho, se encarga a Don Martín Gómez Tenorio, vecino de
Puebla de Guzmán y administrador de rentas de esa Vicaría y Comisario del Santo
Oficio, por parte del Deam y Cabildo de la Catedral de Sevilla, que practique
las diligencias oportunas para poder comprar alguna casa para hacerla Cilla o
Granero que sirva para recoger y custodiar las ventas decimales del lugar. Vio
una en la Calle El Pozo, propiedad de los herederos de Francisco Ramírez, que
linda al norte con la casa de Marcos González Sánchez y por el mediodía hace
esquina a la Calleja que viene de la Cañada Chica a Puertos de Aspa, que según
opinión de los Maestros nombrados para el efecto, está a propósito para el
acto. Preguntados los dueños, niegan la existencia de títulos de pertenencia;
que en el pueblo se obra de buena fe y no se otorgan escrituras de compra ni se
formalizan particiones, sino que en el caso de haber menores, interviene la
autoridad judicial. Sus actuales dueños son los hermanos Juan Ramírez Borrero y
María Ana Ramírez Borrero (viuda de Bartolomé Sánchez), que la poseen quieta y
pacíficamente sin contradicción de persona alguna; que la heredaron de sus
difuntos padres Francisco Ramírez y María Borrero, que igual la poseyeron
mientras vivieron, pagando las reales contribuciones, y así la heredaron de su
padre, y éste a su vez de su madre María Gómez Barbada.
Posteriormente, el día diecisiete de agosto del
mismo año, el notario de ventas de Puebla de Guzmán, se presenta ante Bartolomé
Vélez Romero, Alcalde de primer voto y con el testigo Lorenzo Fernández
Márquez, presentado por el Comisario del Santo Oficio Martín Gómez Tenorio,
para dar fe de lo expresado anteriormente.
El día trece de julio de mil setecientos noventa y
nueve, ante el Escribano Real Público de la Villa de Aroche, se presentan los
dueños (hermanos Juan y María Ana) y dicen: " que les corresponde en
posesión unas casas ruinosas con un cortinal, provenientes de herencia de sus
difuntos padres y que se encuentran ubicadas en la esquina del callejón que
viene de la Cañada Chica y Grande hasta Puertos de Aspa e Iglesia de Santa
María de Gracia. Que fueron justipreciados y medidos por Fernando y Gozalo
Serrano, maestros alarifes nombrados por el Cabildo para el aprecio de las
casas, y para el cortinal por Martín Texero y Martín Romero Raya, ambos
labradores. Tienen de ancho veintisiete varas y cuarto las casas y el cortinal,
y de largo sesenta y cuatro varas por todo (veintisiete las casas y treinta y
siete el cortinal). Valoraron en Cuatro mil noventa y cuatro reales de vellón
libres de tributos, censo, hipoteca, venia, señorío y obligaciones especial y
general, según certificaron el día catorce de agosto de mil setecientos noventa
y ocho y por la Certificación del Oficio de Hipotecas dado por Manuel Antonio
de la Fuente, escribano de ellos en la Villa de Niebla.
Éste escribano certifica todo lo actuado y da fe
en Niebla y se informa que la compra se hace para construir Granero o Cilla
donde recoger sus diezmos. Informa que los dueños confiesan haber recibido el
veinticuatro de octubre de mil setecientos noventa y ocho los cuatro mil
noventa y cuatro reales de vellón en moneda buena y usual y corriente en éstos
reinos. Firman los testigos: Francisco de Paula Márquez, presbítero cura más
antiguo de la parroquia, José Antonio Romero Rico, Julián Pérez Bravo, como
vecinos, y Juan Romero Ramírez y Domingo Mancheo Chaparro. "
CALAÑAS, 2015