El día 11 del mes de octubre de 1938,
por el Ayuntamiento de Calañas, se inician los trámites para la colocación de
una cruz en la puerta llamada del porche (puerta de poniente) de la Iglesia
Parroquial, solicitando al Arzobispado de Sevilla dicha autorización.
Desde éste Organismo no demoran la
contestación, ya que el día 14 del mismo mes, dirigen escrito a través del Cura
Párroco, denegando la instalación.
Pasan los meses y desde el
Ayuntamiento se realizan conversaciones a título personal con diversas
autoridades provinciales con el fin de poder conseguir lo que hasta ahora
parecía algo difícil de alcanzar.
En el pueblo se realizan ya
peticiones de donativos para sufragar los gastos que se deriven de la
colocación de la cruz, alcanzando la cifra de 1.003,75 pesetas, cantidad
similar a los gastos de construcción.
El día 3 de agosto de 1939, desde el
Ayuntamiento, vuelven a dirigirse al Sr. Vicario General del Arzobispado de
Sevilla, alegando que la citada instalación se realizaría en la vía pública y
separada unos tres metros y medio de la puerta de poniente, no siendo obstáculo
alguno para la entrada al templo.
Finalmente es aceptada la solicitud
de colocación así como la bendición de la misma por parte del Cura Párroco,
realizándose las obras por el Ayuntamiento utilizando los planos presentados.
En la década de los ochenta, la Cruz
fue retirada de su actual ubicación y trasladada a los jardines delanteros del
Cementerio Municipal.
CALAÑAS, 2017